Buñuelos de verdura



Otra receta que le he pedido a mi madre que cocinara, cuando me ha venido a visitar, son los buñuelos de acelga o de espinaca. Dependiedo de la época del año y de la verdura que haya en las verdulerías los hacemos de una u otra verdura. En este caso vimos una acelga muy verde y fresca.

Ingredientes

  • 2 atados de acelga picadas bien finas
  • 1/2 taza de harina
  • 2 huevos ecológicos batidos
  • 10 gr de levadura fresca
  • Sal y pimienta negra al gusto
  • 1/2 taza de agua tibia
  • Aceite de girasol para freír

Preparación

Lavamos muy bien las acelgas, si están muy frescas y tiernas no hacen faltan hacerlas al vapor. Si están un poco duras lo que hacemos es poner en una olla las hojas de las acelgas sin las pencas y las dejamos que se cocinen unos pocos minutos a fuego lento. Rápidamente las acelgas se van a poner muy blandas y no van a perder sus nutrientes. Las escurrimos de la cacerola y la apretamos bien para quitarles el agua. Si son frescas, le cortamos las pencas y las picamos muy finamente.
Desmenuzamos la levadura con el agua tibia para que fermente la masa y los buñuelos salgan más esponjosos. En un bol mezclamos la harina con el agua de la levadura hasta que deje de estar grumosa. Luego incorporamos los huevos batidos, la sal y la pimienta. Una vez que está consistente la mezcla agregamos las acelgas picadas. Si queremos que los buñuelos salgan blandos agregamos más agua, si queremos que sean muy esponjosos dejamos que la preparación parezca una masa espesa. Mi madre deja la masa reposar una hora antes de freírlos.
En una sartén esparcimos abundante aceite de girasol, cuando ésta esté caliente con una cuchara tomamos un poco de pasta y la echamos en la sartén. Intentamos colocar varias cucharadas en la sartén, siempre y cuando no se toquen los buñuelos unos con otros. Les damos vuelta y vuelta para que se doren bien. En un plato con papel de cocina vamos poniendo los buñuelos de verdura, para que éste absorba la grasa sobrante y salgan los buñuelos secos.
Ya están listos los buñuelos. Se comen calientes y recién fritos, así estarán muy crujientes. A mí me gusta picotearlos del plato recién servido. Hum! qué ricos…

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